Ante la crisis en materia de combustible, es importante acentuar lo inimaginable que resultaría vivir en una ciudad sin fuentes de energía.
Por ello, es necesario retomar la búsqueda de fuentes energéticas alternas, con las que la Ciudad de México pueda satisfacer la demanda, la cual va en aumento.
Una alternativa recientemente analizada por las autoridades, y que ha funcionado con éxito en el extranjero, es la utilización de residuos urbanos como fuente de energía. A esto se le conoce con el nombre de Waste to Energy (WTE).
Consistente en obtener energía eléctrica por medio del calor generado en la quema de los residuos urbanos. Esta combustión de desechos se lleva a cabo, de manera controlada bajo estándares estrictos de cuidado ambiental, en una Planta de Valorización Energética de Residuos (PVE).
Se trata de una solución a dos problemas de gran escala que tiene la Ciudad de México: la generación de basura y la demanda energética.
La primera es una problemática actual en producción masiva de residuos que ha sobrepasado al sistema de recolecta, por lo que esta alternativa se enfoca en una estrategia para su manejo.
La segunda se deriva del rápido crecimiento de la población con un mal hábito de consumo: sin concientización y sin estrategias de separación o reciclaje.
Recolección de basura: sistema eficiente
Un modelo a seguir en la implementación de soluciones energéticas es la que aplica la ciudad de Oslo, Noruega, donde existe una eficiente recolección de basura por medio de un sistema de clasificación por colores: una bolsa azul para los residuos plásticos, verde para los desechos orgánicos y blanca para el resto.
La eficiencia de este sistema de recolección y su utilización en las plantas energéticas WTE en distintas ciudades europeas ha llevado, incluso, a la compra-venta de basura internacional a fin de abastecer la demanda.
En el caso de México, la multinacional Veolia presentó, en 2017, un proyecto de construcción de una megaplanta WTE, al ocupar la Ciudad de México el segundo a nivel mundial en generación de desechos urbanos.
Este proyecto ya se ha presentado a las autoridades como una alternativa en temas de suministros de energía. Además, la energía generada podría emplearse en la red del Metro de la Ciudad de México.
La planta comenzará a operar en el año 2020 y su impacto equivaldrá a plantar 28 millones de árboles.
Para saber más
Eva González Pérez, Tú puedes cambiar al mundo, Universidad Intercontinental. Disponible en https://www.4uic.mx/tu-puedes-cambiar-al-mundo/
Mayela Limones, Hablemos de responsabilidad social, Universidad Intercontinental. Disponible en https://www.4uic.mx/hablemos-de-responsabilidad-social/
Vianney González, Día Internacional de la Mujer 2019: desarrollo sostenible. Universidad Intercontinental. Disponible en https://www.4uic.mx/dia-internacional-de-la-mujer-2019/
Licenciaturas, Universidad Intercontinental. Disponible en https://www.4uic.mx/licenciaturas/
Posgrados, Universidad Intercontinental. Disponible en https://www.4uic.mx/posgrados/
Veolia, In Mexico City, Veolia will build and operate one of the largest waste to energy facilities in the world and the first in Latin America. Disponible en
https://www.veolia.com/en/news/waste-to-energy-renewable-energy-mexico